El sector de la alimentación es una gran industria transformadora que tiene que cumplir unos requerimientos especiales, ya que el producto que transforman son alimentos que acaban siendo ingeridos por las personas, por lo que los cepillos utilizados en él deben cumplir unos requisitos.
Para que el proceso industrial alimentario sea seguro, las empresas del sector de la alimentación, tienen que tener procesos que deben cumplir una serie de condiciones que ha sido la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE.UU. (FDA, por sus siglas en inglés, Food and Drug Administration) la que ha marcado los requerimientos.
Los fabricantes de cepillos, como son productos muy introducidos en todo tipo de procesos de las fábricas de alimentos, también deben atenerse a cumplir con las reglas de la FDA para poder suministrar cepillos que sean certificados como compatibles con la industria alimentaria.
Cuando una persona que acostumbra a visitar empresas industriales, observa una fábrica alimentaria, se identifican rápidamente las características singulares de estas industrias: las máquinas son de acero inoxidable, plásticos técnicos, procedimientos de higiene y limpieza,
equipos de protección y control para evitar la contaminación cruzada, equipos para evitar la contaminación por residuos orgánicos de las propias personas como saliva o pelos, y un largo
etcétera.
La FDA requiere que los componentes de las máquinas (y los cepillos técnicos se incluyen), utilicen unos materiales muy concretos, que sean estables ante el contacto con los alimentos, evitando el paso de contaminantes hacia los productos.
Los fabricantes de cepillos, que básicamente se utilizan componentes plásticos deben asegurar que:
- Las bases de los cepillos deben ser hechas de polietileno virgen, al menos PE-300, no permitiendo la utilización de plásticos más susceptibles a la contaminación como los polipropilenos o el PVC. Se deben descartar también bases de caucho normal, PLA normal de la impresión 3D y otros materiales complementarios utilizados en algunas ocasiones.
- Los filamentos de los cepillos tampoco deben ser de polipropileno, PVC, pudiendo utilizarse algunas variedades de poliamidas, y especialmente PBT.
- Las grapas que fijan los mechones de los cepillos al ser metálicas, deben ser también de acero inoxidable, calidad mínima 304. Este es un punto muy importante, ya que las grapas estándar y fáciles de conseguir y trabajar son de acero al carbono cincado, y no están permitidas por el riesgo de oxidación.
- El aceite de lubricación en la máquina debe ser compatible con la industria de la FDA. Éste es otro punto importante, ya que componentes del cepillo como los filamentos o las grapas pasan por zonas con lubricación permanente, por lo que ese aceite de lubricación debe ser compatible con la FDA.
- Filamentos naturales, tanto de origen animal como el pelo de cerdo o cola de caballo, y de origen vegetal como el tampico, no son compatibles con esta norma.
- Filamentos de alambre metálico, sólo es posible la utilización de alambres de acero inoxidable, prohibiendo el uso del acero al carbono tanto recubierto como sin recubrir, y los de latón.
- Del mismo modo, tornillos de fijación, ejes, prisioneros o pasadores, o cualquier otro elemento comercial de fijación del cepillo a la máquina portante debe ser de acero inoxidable.
Un tema importante es el de los colores de los filamentos. Un cepillo técnico tiene riesgo de perder filamentos, por lo que los filamentos deben tener un color especial que permita ser detectados visualmente si hay alguna unidad que se desprenda del cepillo y contamine los alimentos.
El típico, más utilizado y común, es el color azul oscuro del PBT especial FDA, que está disponible fundamentalmente en medidas de 0,5 y 0,7 mm.
Existe también una variedad de PBT, también compatible con la FDA, que se llama “metal detectable”. En su composición tiene carga metálica, que le da un color característico gris oscuro antracita, que estando disponible en 0,35 y 0,60 mm permite ser detectado en un detector de metales que incorpore el proceso. Se debe comprobar en el propio detector la cantidad de filamentos que éste detecta según su propia sensibilidad.
Junto con estos cepillos, se emite un certificado de compatibilidad con la industria alimentaria, en el que se especifican todos los materiales utilizados en la fabricación de los cepillos técnicos industriales.
Si necesita cualquier aclaración sobre los cepillos en la industria alimentaria, no dude en contactarnos.
